La carga y descarga exigirá ticket con un límite de media hora
«Favorecer la rotación de vehículos y aumentar la disponibilidad de las plazas», el objetivo
El Ayuntamiento ultima la puesta en marcha del nuevo sistema de regulación de las plazas de carga y descarga en la ciudad, el cual arrancará próximamente en una decena de puntos en el centro y que, en la práctica, limitará a 30 minutos el tiempo en el que se podrán realizar estas tareas con el objetivo de favorecer la rotación de vehículos y aumentar la disponibilidad de las plazas.
En concreto, el Consistorio ha establecido diez zonas: Angelinas, Catedral, Colón, Compañía, Juzgados, La Puebla, Plaza de Abastos, San Lázaro, San Miguel y Santiago Amón. Estas, a su vez, agrupan un total de 35 zonas para la carga y descarga que, en total, constan de 135 plazas.
Estas plazas para carga y descarga estarán restringidas a camiones, furgonetas y vehículos mixtos de dos asientos. Serán totalmente gratuitas y funcionarán en un horario de 8 a 20 horas los días de diario; y de 9 a 14 horas, los sábados. Esta información ya está disponible en la señalización vertical que el Ayuntamiento y la empresa Dornier están instalando en cada una de las 35 zonas elegidas para poner en marcha este proyecto.
Este sistema, que es una de las mejoras incluidas en el nuevo contrato del servicio de aparcamiento regulado de la ciudad o zona azul, estará totalmente digitalizado. Esto implica que cualquier profesional que vaya a utilizar una plaza de carga y descarga deberá utilizar un teléfono móvil inteligente con la aplicación Parkunload, que ya está disponible tanto en Google Play como en la App Store. Además, en cada señal hay un código QR con el que se pueden descargar la aplicación de forma directa.
Funcionamiento. Los responsables de los vehículos autorizados para realizar tareas de carga y descarga deberán entrar en la aplicación y obtener obligatoriamente un ticket gratuito de estacionamiento. Antes, deberán registrarse introduciendo el número de teléfono y validándolo a través de un mensaje. El sistema es similar a la actual aplicación de la zona azul, se tendrá que identificar el vehículo o vehículos -matrícula, marca, modelo, tipo o, incluso, una foto- y la zona en la que va a parar con el código que consta en cada señalización vertical.
En cuanto esté activo, tendrá un máximo de 30 minutos para realizar las tareas de carga y descarga. Terminado este tiempo -la aplicación muestra cuánto queda y avisa cuando finaliza-, deberá abandonar la plaza ya que, al igual que ocurre con la zona naranja, será obligatorio mover el vehículo. La aplicación, además, detectará la zona de carga y descarga más cercana al conductor.
La intención del Ayuntamiento en convocar a los colectivos implicados a una reunión informativa el próximo 26 de mayo, en la que también estarán los responsables de Dornier. En ella se dará cuenta de todos los detalles y del sistema y se resolverán las dudas que puedan existir. El siguiente paso será su puesta en marcha.
Carolina Gómez, concejala de Tráfico: «Hay quejas por el mal uso de estas zonas»
La responsable de Tráfico del Ayuntamiento, Carolina Gómez, explicó ayer a este periódico que la implantación de esta medida se lleva a cabo porque «es necesario regular el uso de forma efectiva las zonas de carga y descarga, para que sean utilizadas por los vehículos que indica la norma para lo que son, para cargar y descargar y por un tiempo limitado».
La edil desveló que «hay múltiples quejas y denuncias de usuarios por un mal uso o abuso» de ahí que el Ayuntamiento considere que ha llegado la hora de «exige su control». «Desde el equipo de Gobierno creemos que es mejor poner en marcha soluciones para concienciar de un buen uso de estas zonas, el cual es necesario para muchos colectivos en su trabajo diario y es gratuito, que sancionar por un posible exceso o abuso, que es denunciado por los colectivos que lo necesitan».
Carolina Gómez explicó también que este sistema ya funciona en capitales cercanas, también dentro del contrato de la zona ORA, y recalcó que será un sistema «gratuito y sencillo», «algo muy demandado por las asociaciones y empresas implicadas en el reparto y la distribución», puntualizó.